Mostrando entradas con la etiqueta incentivos. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta incentivos. Mostrar todas las entradas

miércoles, 11 de mayo de 2016

Los laboratorios publicarán los pagos a médicos en España el día 30 de junio



Alberto Vigario,
elEconomista.es,  9 de mayo de 2016
 

Las farmacéuticas no costearán la formación de quien no acepte esta medida



Mc anas




Los laboratorios farmacéuticos presentes en España han iniciado un apuesta por la transparencia económica que tendrá su punto fuerte el próximo 30 de junio. Ese día, todas las compañías del sector farmacéutico adscritas a la patronal Farmaindustria publicarán en sus páginas web todas las relaciones económicas que hayan mantenido durante el pasado año 2015 con los profesionales médicos con los que colaboran en nuestro país.

Esto incluye todas las colaboraciones que supongan una transferencia de valor, como los gastos por desplazamientos a congresos médicos, o los pagos por conferencias. En total habrá cuatro grandes conceptos: donaciones; actividades formativas y reuniones profesionales; prestación de servicios; e investigación y desarrollo.

La medida -adelantada por elEconomista el pasado 7 de julio- tiene aún un frente abierto con los profesionales médicos. Las normas aprobadas este año por Farmaindustria permitían hasta ahora a las compañías hacer públicos estos pagos de dos maneras: de forma individualizada o agregada.

Cada laboratorio tenía el poder de decidir si publicaba el montante total de lo que invierte en formación de los profesionales o si optaba por dar luz verde al gasto que le supone cada médico, con nombre y apellidos, y sus distintos conceptos.

Ahora, una mayoría de los laboratorios se decanta por la segunda opción y quiere que la próxima asamblea general de la patronal, el 26 de mayo, apruebe el cambio para obligar ya este 30 de junio a hacer públicos los datos de manera individualizada. La medida iría incluso más allá y los laboratorios están dispuestos a de jar de colaborar en la formación de los médicos que se nieguen a ver sus transferencias publicadas.

Los laboratorios han dado este paso al conocer por la Agencia Española de Protección de Datos (AGPD) que la publicación de los datos de los médicos que colaboren con los laboratorios así como las cantidades que perciban es un acto legal, ya que su prestación de servicios debe ser entendida como un bien de interés general y, por tanto, susceptible de ser sometida a conocimiento público.

Original en 

http://bit.ly/23NoVF3





jueves, 8 de enero de 2015

“Debemos volver al modelo sanitario de farmacia” afirma Daniel Gollán, viceministro de Salud de la Nación



Prensa COFA , 7 de enero 2015 ( original Revista Correo Farmacéutico, diciembre 2014)

Lo señalan como el funcionario más influyente hoy en el área de Salud. Es el viceministro y podría conducir la cartera nacional en caso de que el Dr. Juan Manzur decida dejar el cargo para focalizarse en las elecciones provinciales en Tucumán.

En esta entrevista, el Dr. Daniel Gollán da su visión sobre el modelo de farmacia y el perfil de farmacéutico que se pretende para la Argentina. También analiza las dificultades del financiamiento de la cobertura de medicamentos por parte de Estado y la Seguridad Social. Tratamientos de alto costo, PAMI, producción pública, farmacias shopping son algunos de los tópicos que también recorre en esta entrevista.


El 5 de junio Daniel Gollán asumió al frente de la flamante Secretaría de Salud Comunitaria, cargo que comparte con el de viceministro de Salud de la Nación. La directiva de esta nueva repartición es “articular todos los programas del ministerio, ya que el ser humano es integral y hay que abordarlo en toda su dimensión, con sus complejidades sociales, a través del armado de dispositivos de participación comunitaria”. De él dependen, entre otras áreas, los programas Remediar, Maternidad e Infancia y también la política de Producción Pública de Medicamentos. Gollán es médico sanitarista, coordinó durante cuatro años el Programa Especial de Salud de la ex Secretaría de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva y fue subinterventor de la Anmat desde 2008 hasta 2010.


-Siendo el medicamento un elemento importante para la salud comunitaria, ¿cómo se inserta el programa Remediar en esta política?
-Es sustancial. Por el primer nivel de atención discurre el grueso de las acciones de la estrategia de Atención Primaria de la Salud. Contar en este nivel con un programa de provisión gratuita de medicamentos que cubre hasta el 80% de las necesidades es de vital importancia. Por eso estamos aumentando los productos incluidos en el programa, llegando cada vez a más rincones. A partir del año próximo vamos a estar llegando a los titulares del programa Incluir Salud. Más de un millón de personas que son titulares de pensiones no contributivas, discapacitados, veteranos de Malvinas.
-¿No se va a entregar en farmacias?
-La medicación se les va a entregar, como siempre hasta ahora, en el mismo lugar y en el mismo momento en que se están atendiendo, en los más de 7000 Centros de Atención Primaria a lo largo y ancho del país y en algunos hospitales de menor nivel de complejidad tecnológica y de especialización.
-¿Cuántas personas hoy no tienen cobertura de medicamentos en la Argentina?
-La población mayoritariamente tiene acceso. Lo que hay que ver es si el concepto de acceso implica oportunidad y dosis suficiente. La cantidad de gente que hoy no tiene cobertura o cuya única cobertura depende del subsector público es aproximadamente un tercio de la población. Ahora, paradójicamente, muchas veces esta población está pudiendo acceder a su medicación a través del Remediar sin poner un peso de su bolsillo, mientras que una persona que tiene obra social tiene que pagar un cuarenta, un cincuenta, un veinte por ciento. 4,5 millones de personas habitualmente usan el Programa Remediar y más de 15 millones lo han utilizado durante los 10 años de su vigencia y su botiquín de medicamentos hoy contiene 64 productos. En general la Argentina tiene un acceso a los medicamentos muy superior al que tienen los países latinoamericanos, desde los más simples hasta los de alto costo. Esto hace incluso que muchos ciudadanos de países limítrofes crucen la frontera para buscar medicamentos en la Argentina.


Medicamentos de alto costo
“En la Argentina un tercio del gasto en salud se deriva a la medicación. Un porcentaje muy alto si lo comparamos con casi todos los países del mundo. En Europa es entre un 7 y 10%. Esto tiene tres causas fundamentales: la primera es la gran incidencia que están teniendo los medicamentos de alto costo, que están representando en algunos países latinoamericanos hasta casi el 50% del gasto en medicamentos. Estamos hablando de una cifra que podría rondar los 20 o 25.000 millones de pesos anuales y que probablemente una buena parte no los estemos utilizando correctamente. Estos medicamentos de alto costo se están utilizando de una forma bastante poco controlada en cuanto a su eficacia. El Dr. Antonio La Scaleia, presidente del IOMA, presentó hace muy poco en el Congreso de la Nación un estudio con una gran casuística donde demostraba que entre los medicamentos de última generación como los anticuerpos monoclonales para el tratamiento del cáncer y los protocolos de tratamiento convencionales había una diferencia que no era mayor a 15 días de sobrevida. E incluso una calidad de sobrevida que habría que entrar a discutir desde el punto de vista ético. Es lógico que cuando a uno le toca un ser querido quiere tener lo supuestamente mejor, pero también es obligación del Estado establecer fehacientemente la eficacia de todo esto que estamos pagando a tan altísimo costo. Porque realmente la eficacia no está probada en muchos de estos tratamientos. Y los recursos no son infinitos. Estamos sacando quizás para atender a otras necesidades de salud que salvarían muchas más vidas o que darían mucha más calidad de vida. Países como Inglaterra, en muchos productos, sobre todo los antirreumáticos, está pagando el medicamento contra eficacia demostrada. También hay otros países que están poniendo topes, luego de los cuales se evalúa según la eficacia del medicamento si se va a seguir pagando o no. Yo creo que necesitaríamos establecer fehacientemente la eficacia de cada uno de estos medicamentos para evitar este importante drenaje de divisas, porque son casi todos productos importados, y que nos impide aplicar estos fondos a otras acciones de salud con mucho mayor resultados en términos sanitarios”. Para que quede claro: los pacientes que lo necesitan deben poder acceder a los medicamentos de alto costo, pero si éstos no son realmente eficaces en el tratamiento de su patología, entonces estamos dilapidando recursos. Cuestionados criterios científicos “Que el impacto de los medicamentos de alto costo y baja incidencia se ha salido de cauce es una verdad inexorable. Es impensable, por ejemplo, que cada oncólogo haga lo que le parece de acuerdo a la última información científica que recibió, porque la información científica en el mundo hoy está bastante cuestionada. Es imprescindible contar con protocolos de tratamiento desarrollados con base científica y realismo sanitario.
Son de público conocimiento los múltiples casos de tergiversación de supuestos estudios publicados en revistas de referato internacional de primer nivel, firmados incluso por eminentes investigadores, que luego reconocieron que pusieron la firma a cambio de un estipendio. En los productos innovadores es peligrosa la práctica de acortar los tiempos de investigación porque más que la necesidad de dar una respuesta sanitaria, las grandes farmacéuticas están compelidas por una cuestión de lucro. La necesidad de sostener un andamiaje inmenso sacando productos biológicos originales rápidamente a la venta es una práctica realmente peligrosa. En el caso de los biosimilares en cambio, si uno tiene una correcta caracterización de la molécula, se puede avanzar más rápido. Hoy en día se puede establecer por tecnología de punta la biosimilaridad de la molécula en forma prácticamente indubitable. Creo que debemos avanzar en el mundo hacia un sistema donde los Estados financien completamente los nuevos desarrollos farmacéuticos, sacar el tema de la rentabilidad y poner un criterio de Salud Pública. Pero es difícil, probablemente sea una utopía. Los medicamentos son una cosa muy seria. Es la diferencia entre la vida y la muerte. El debate entre el lucro y el criterio sanitario está en muchas organizaciones libres de la comunidad en el mundo, también en muchos gobiernos. Deberíamos pensar que por lo menos para un grupo importante de patologías prevalentes en el mundo, tanto la Organización Mundial de la Salud como los Estados deberían ponerse a trabajar desde un criterio de salud pública y no desde un criterio comercial”.


La lapicera floja”
El Viceministro vuelve a criticar a sus colegas, cuando se refiere a “una práctica que se lleva gran parte del presupuesto en medicamentos, que se da porque los médicos argentinos tenemos la receta y la lápicera flojas; tenemos una tendencia a medicalizar, y hoy tenemos casos de pacientes toman entre 5 y 8 medicamentos, lo cual hace que haya interacciones nocivas. La segunda causa de intoxicaciones en los servicios de toxicología son los medicamentos, en particular los psicofármacos. Tenemos que tomar conciencia -tanto los prescriptores y los dispensadores como la industria con la publicidad- del daño que se le está haciendo a la población con este consumo tan intensivo de medicamentos. Todos debemos actuar responsablemente para poder llegar al objetivo de un uso más racional de los medicamentos”.
-Hay proyectos de ley presentados que buscan regular la prescripción y la publicidad…
-Tenemos una ley de prescripción por nombre genérico desde el año 2002 que casi no se cumple. Tengo entendido que se presentó un proyecto en el cual desaparece la posibilidad de agregar un nombre comercial y también hay un artículo que prohíbe explícitamente a los organismos pagadores, obras sociales por ejemplo, reconocer y pagar esa receta porque no es válida. Por otra parte, en cuanto a la calidad de los productos, si los medicamentos están aprobados por el organismo regulador, que es la ANMAT, es porque han sido testeados y tienen condiciones de similaridad, sino no estarían aprobados. Es un muy mal mensaje de muchos profesionales decir que un enalapril de tal marca es bueno y de tal otra no hace efecto, porque entonces está diciendo que todas las pruebas que hace el organismo regulador no sirven para nada. Otro proyecto que me he enterado está en la Cámara Baja restringe la publicidad, aunque los laboratorios pueden realizar promoción institucional. Lo que no pueden es decir: “Este medicamento te cura inmediatamente” u ofrecer una imagen a la audiencia que da la sensación de que a través de la toma de un medicamento, milagrosamente se está en condiciones de ir a trabajar. Es un mensaje nocivo para la salud. Y cuesta mucho hacer un control. Este tipo de normas para reglar la publicidad está vigente en la mayor parte de los países del mundo. No va a ser un invento argentino si sale esta ley.


Uso y abuso
“Otro factor que influye en el gasto en medicamentos es la automedicación, incentivada por la publicidad. Una tercera parte de toda la medicación que se toma en la Argentina es por automedicación”. -Hay estudios a nivel internacional que demuestran que se podrían ahorrar más de 500 billones de dólares por año en gastos evitables por el mal uso de los medicamentos…
-Nosotros estamos trabajando con algunos investigadores sobre cuál sería el efecto concreto en términos de morbimortalidad que produce la automedicación o la sobremedicación. Es necesario tener un estudio científico en la Argentina sobre cuál es ese daño. Hay patologías que se desencadenan producto del mal uso de la medicación que no entran por el servicio de Toxicología, sino como hemorragias digestivas, accidente cerebrovascular, casos de hipertensión, un sinnúmero de cuadros clínicos. Eso es lo que a veces se nos pierde porque es difícil de detectar, pero puedo asegurar que es alarmante.
-Se da automedicación y abuso, pero también falta de adherencia a los tratamientos y mal uso…
-Sí, falta de adherencia a los tratamientos crónicos, discontinuación de tratamientos para enfermedades agudas, pero como las presentaciones farmacológicas vienen por 16 y se necesitan 21 dosis para completar 7 días de antibiótico, se corta el tratamiento. Es típico el caso de estados gripales, en los que obviamente no hacía falta tomar un antibiótico que igualmente fue recetado. A los dos o tres días la persona se siente bien y corta el tratamiento y después esos comprimidos que quedaron se los da a otra persona. En el tema psicofármacos, en general el profesional tiende a prescribir como si fuera cualquier otro fármaco, sin ninguna recomendación de cuidado con su propio tratamiento y también con el entorno, los nietos o los hijos que usan esos medicamentos para la “jarra loca”. Necesitamos muchísima más conciencia y responsabilidad por parte de todos los actores.
-En este contexto de automedicación, de falta de adherencia a los tratamientos, etc., hay experiencias en muchos países en los cuales el farmacéutico tiene un rol más activo que el que tiene acá en la Argentina en cuanto al seguimiento farmacoterapéutico, la atención farmacéutica a los pacientes. ¿Ud. cree que esto podría ser viable en nuestro país para solucionar estos problemas?
-Yo creo que puede ser viable. Tenemos títulos de profesionales, tenemos que actuar profesionalmente. Yo conozco muchísimos farma céuticos que son muy profesionales y realmente asumen un rol de recomendación, de clarificación, invierten tiempo en hacer la diferencia entre ser farmacéuticos y ser simples vendedores de medicamentos. Infracciones No obstante, el viceministro Gollán se muestra crítico con las infracciones que, afirma, se detectan en el ejercicio profesional del farmacéutico. “Cuando las inspecciones de los organismos del Estado llegan, tratan de evadir responsabilidades al no haber cumplido con las normas. Yo debo decir que en la época de la efedrina, íbamos a hacer inspecciones a las farmacias, encontrábamos muchos talonarios de psicofármacos firmados por médicos para ser dispensados sin que haya habido consulta. Esto hay que corregirlo. Necesitamos que las universidades, las asociaciones profesionales tomen esto en sus manos”. “Días atrás estaba comprando en una farmacia con mi esposa, que es farmacéutica. Entró una señora, pidió una amoxicilina y se la dieron sin receta. Y después pidió un alprazolam y le dijeron: ¿trajiste la receta? Cuando les contestó que no la tenía le dijeron: “Bueno, traémela después”. Esto se repite muchas veces. Si los que dispensamos dispensamos de esta manera, si los que prescribimos prescribimos mal y nuestros Colegios no toman una actitud fuerte, es muy difícil construir una conducta ciudadana y profesional”.

-¿Cuál es el modelo de farmacia y el perfil de farmacéutico que ud. cree que debería tener la Argentina?
-La farmacia tiene que existir sin el shopping que se monta alrededor.
-Está la resolución 1632 que regula al respecto…
-Claro. Sin embargo cuesta que se cumpla. Hecha la ley hecha la trampa. Tenemos resoluciones del gobierno de la Ciudad de Buenos Aires que favorecerían este tipo de farmacias-shopping. Pero el medicamento es algo suficientemente serio como para no mezclarse y no banalizarse con otros productos. Estamos hablando de la diferencia entre dispensar correctamente un medicamento o no. Tenemos que volver al concepto del farmacéutico, su farmacia, atendiéndola con responsabilidad profesional, haciendo todas las recomendaciones que él, con su conocimiento, sabe que debe hacer. Debemos salir del modelo de vendedores de remedios como si fueran caramelos y volver al modelo sanitario de farmacia.


Producción pública de medicamentos
“La potencialidad de los laboratorios públicos es muy grande. Hoy por ejemplo, tenemos un doble efecto beneficioso: muchas veces ganan las licitaciones en algunos renglones, pero muchas otras veces empujan el precio hacia abajo. Desde que tenemos laboratorios públicos compitiendo en licitaciones del programa Remediar, los precios han bajado muchísimo.
Y los renglones que quedan desiertos se los compramos directamente a los laboratorios estatales respetando el precio menor que había en anteriores procesos de licitación. Esto nos permite llegar con medicamentos seguros y eficaces a un costo que a veces es diez veces menor al del mejor precio de farmacia.
Ahora se aprobó en la Cámara de Diputados un proyecto de creación de una Agencia Nacional de Producción Pública de Medicamentos que le daría un financiamiento especial, muy orientado a reorganizar todo el sistema, articularlo cada vez más, a que se racionalicen las compras, a que se hagan compras en conjunto, a que no todos produzcan lo mismo. A tener laboratorios regionales y muchos de ellos se especialicen en alguna línea para los programas nacionales de gran volumen para todo el país”.
-¿Van a elaborar medicamentos de alto costo?
-Sí, de hecho Hemoderivados Córdoba ya está produciendo medicamentos de mediano costo y algunos de alto costo. Está cubriendo un 60% del mercado en gammaglobulina y albúmina y un 5% en factores de coagulación. Y hay un proyecto de aumentar también hasta un 50% en este rubro a partir de que va a poder tener la materia prima. Están avanzando hacia líneas de investigación como la hematina, que va a salir próximamente. El factor 8 recombinante también está prácticamente en su periodo final. Cada laboratorio ha definido una línea de innovación. Algunos van por los oncológicos hematológicos, otros van por los desarrollos de tuberculostáticos de 2 y 3° línea, también hormonales. El concepto general es abastecer al sector público a través de los programas públicos de provisión, no entrar en la parte privada porque consideramos que se debe garantizar el acceso a ese 33% de la población que solo tiene cobertura estatal, pero también entrar en las líneas innovadoras que el sector privado no desarrolla porque no son económicamente rentables. Se están haciendo muchas cosas en ese sentido, como sueros antiofídicos, vacuna BCG intravesical. Hay laboratorios del Estado que están ampliando su capacidad para fabricar sueros parenterales, por ejemplo el LEM de Rosario y otros casos como en La Rioja, donde se está desarrollando uno nuevo. Y en los lugares donde tenemos sueros producidos por el Estado los pagamos al 60% o menos que el mejor oferente. También tenemos fi toterápicos que se están elaborando en el laboratorio de Misiones. Cada laboratorio define cuáles son los productos que hacen falta para su región, intercambian con los otros y planifican qué van a producir a gran escala para los programas nacionales. Los proyectos son financiados por el FONDEAR del Ministerio de Economía. En este momento hay desarrollos de moléculas biológicas originales que se van a canalizar por el hospital público. Paralelamente estamos incentivando a la industria nacional privada para innovaciones locales, biosimilares. La ANMAT está definiendo líneas de trabajo en biosimilaridad para que estas empresas puedan producir aquí porque todo esto, además de mejorar el acceso, genera sustitución de importaciones, evita drenaje de divisas y genera fuentes de trabajo genuinas.
La producción pública la imaginamos como una estrategia importante pero dentro de un marco donde tenemos que sostener todo el conjunto, fundamentalmente de la industria nacional.

Cobertura de medicamentos del PAMI y las obras sociales
“El PAMI es un organismo que está proveyendo a 5 millones de personas en prácticamente toda la línea de medicamentos. Algunos al 100% de su precio. Se está haciendo una fuerte tarea a través de la receta electrónica para tener un uso más racional de los medicamentos. Fundamentalmente de psicotrópicos, pero también del conjunto de los medicamentos, se está trabajando mucho en la racionalidad de la prescripción. No se puede tener una persona tratada con 7 u 8 medicamentos”.
-¿En un futuro cercano van a implementarse la receta electrónica y la historia clínica digital en el PAMI, las obras sociales y todo el sistema sanitario?
-Absolutamente. Inexorablemente vamos a ir a la receta electrónica, en lo cual PAMI ya ha hecho punta. Hoy tecnológicamente es posible hacerlo. Quedarían resolver problemas de conectividad, que ya con el nuevo satélite van a quedar prácticamente resueltos en todo el país. Es cuestión de tiempo, pero la incorporación de las nuevas tecnologías irá llegando indudablemente.
-¿Va a haber una historia clínica unificada?
-Hay un proyecto de ley que está dando vueltas. Vamos hacia eso. Hay muchas provincias, como Tucumán, la provincia de Buenos Aires y otras más que han implementado sistemas informáticos que prácticamente tienen en línea a todo el sistema sanitario.
-Hay experiencia internacional en cuanto a que a partir de la receta electrónica y la historia clínica digital el farmacéutico puede participar más activamente en el seguimiento farmacoterapéutico de los pacientes.
-Sí, la ANMAT tiene un sistema de trazabilidad que hasta ahora ha tomado solo los medicamentos de alto costo. Ahora va a avanzar hacia la etapa de los de mediano costo y luego cierra el círculo con los de bajo costo.
-Igual convengamos que hoy muchos medicamentos escapan a la trazabilidad porque van por fuera del canal farmacéutico…
-Sí, absolutamente. Hay que tener en cuenta que cuando uno lanza un sistema de trazabilidad de medicamentos de mediano costo y bajo costo, probablemente haya una resistencia de tipo fiscal, no sanitario. Porque es probable que esa trazabilidad transparente todos los medicamentos, ya no se van a poder escapar.


¿Cambios en el Ministerio de Salud?
Consultado sobre la posibilidad de cambio de conducción y lineamientos de gestión en caso de que el ministro Manzur deje el cargo para participar de las elecciones locales en la provincia de Tucumán, el viceministro Gollán respondió: “Hasta lo que yo sé, el Ministro se va a quedar hasta el fi nal del mandato de la Presidenta. Todos estamos trabajando como que esto va a ser así. No tenemos ninguna directiva respecto de cambios”


Vademécum
“La Confederación Médica de la República Argentina tiene un vademécum de menos de 500 drogas que resumirían los tratamientos para las patologías. Hay quienes piensan que debería llegar a unas 700 u 800. Más de eso no hace falta”


Ley de genéricos
“Yo creo que la modificación de la ley de prescripción por nombre genérico que está hoy en el Congreso tiene muchas probabilidades de salir porque ya hay un antecedente que está vigente. Sólo que tanto la existente o la nueva deberían cumplirse. Una ley de genéricos es algo más complicado porque hay una posición muy fuerte de los laboratorios de seguir manteniendo las marcas. Considero que el tema va a seguir debatiéndose por mucho tiempo”.




sábado, 27 de diciembre de 2014

El negocio detrás de las recetas



El oscuro circuito de la prescripción de medicamentos

Por
Pablo Tomino y Fabiola Czubaj | LA NACION, 27 de diciembre de 2014


En la Argentina, la venta de medicamentos mueve un negocio de más de 50.000 millones de pesos al año, según cifras oficiales. Foto: Archivo


Todos los días, la profesora Ana María D.G. debía tomar media pastilla para la presión. Pero ella lo hacía sólo si se sentía mal. Un día de problemas inmanejables, el médico del colegio donde trabaja le midió la presión. Los valores estaban fuera de control. Cuando se recuperó, le sugirió ver a un neurólogo y "ajustar el tratamiento" con su médico.

Pero ella prefirió una segunda opinión y le recomendaron un especialista que debía ser bueno porque viajaba mucho por trabajo. "Está bien lo que toma -le dijo el profesional, mientras escribía una receta-, pero vamos a probar con esta otra pastilla, que está funcionando mucho mejor. Eso sí, tómela todos los días." Al salir del consultorio, Ana María no sabía por qué le habían cambiado la pastilla. También desconocía las prácticas con las que la industria farmacéutica incentiva a los médicos a prescribir sus productos.

Muestras gratis, vouchers de grandes tiendas y de casas de electrodomésticos, viajes y hasta dinero en efectivo figuran entre las estrategias que algunos laboratorios utilizan para fidelizar a los médicos. Y así lograr que los "lapiceras", apodo de los doctores en este mundillo, receten los productos que producen y comercializan.

En la Argentina, la venta de medicamentos mueve un negocio de más de 50.000 millones de pesos al año, según cifras oficiales. Sin embargo, consultores independientes especializados en el mercado de fármacos aseguran que la cifra es mayor. La facturación alcanzaría 43.000 millones de pesos, sin incluir los fármacos de alto costo, como los oncológicos, las licitaciones y las ventas directas a los hospitales. En el país, cada año se venden 670 millones de "cajitas" de remedios (el 30% son productos de venta libre), según consigna una conocida consultora internacional.

El lado oscuro de la receta médica esconde un verdadero trabajo de inteligencia. Es que ese preciado "papel" representa el principal ingreso para muchos en esta poderosa industria, como lo expresó el titular de un importante laboratorio nacional. Quizás no toda la responsabilidad recae en los médicos: un sistema descontrolado y los bajos salarios en el área de la salud impiden costearse la participación en congresos o suscribirse a una publicación para estar al día con las novedades en la medicina. Y algunos caen en la tentación.

En este sistema, los agentes de propaganda médica (APM) o "valijas", como se los apoda a los 6000 visitadores que registra la Asociación de Agentes de Propaganda Médica (AAPM), operan como engranajes perfectos: ellos hacen que las "lapiceras" firmen recetas con uno y no con otro fármaco que se traducen en ganancias millonarias. Aunque existe una ley por la que los médicos deben indicar un producto por su nombre genérico, sólo un 13% lo hace. La mayoría incluye la marca. Esto responde también a una falta de confianza en la calidad de los genéricos que el Estado no erradica y que la industria aprovecha.


A los médicos considerados referentes se los conoce como "lapiceras gordas". Según pudo recabar LA NACION de 22 fuentes que actúan en este engranaje, un laboratorio con capacidad de investigación y desarrollo puede invertir un 20% de su presupuesto en la fidelización de los médicos y la promoción de sus productos. Un visitador con diez años de experiencia gana entre 12.000 y 70.000 pesos por mes. El que mejor paga es un laboratorio nacional, cuyo nombre suele verse en pequeños carteles de pasillos de muchos hospitales.

"La seducción, la fidelización y una relación estrecha que perdure en el tiempo, y que puede incluir dosis de intimidación, son las tres etapas básicas para lograr que un médico indique una marca de manera sistemática", confió un capacitador de los cursos de formación de APM. Para eso, los laboratorios necesitan detectar a los médicos que más recetan un fármaco. Si el producto es de la competencia, se activa la etapa de seducción.

La estrategia más común para obtener esos datos es la compra de informes de las auditorías a las farmacias. Esos documentos revelan quiénes son los médicos más "útiles" en cada especialidad. Otra opción está en manos de los visitadores, un ejército de traje y corbata en el que cada vez se ven más faldas. Repletos de bolsas con muestras, obsequios o insumos de oficina, cada mañana recorren los pasillos de los hospitales. Por la tarde, se ocupan de los consultorios privados. Visitan no menos de 15 o 20 médicos por día.

También tienen la tarea de acercarse a las farmacias vecinas de los consultorios privados. Algunos intentan un trueque: información sobre las recetas a cambio de muestras de productos, en los casos menos groseros.

Esa estrategia le permitió a un laboratorio nacional detectar que un oftalmólogo muy reconocido que trabaja sobre una coqueta calle del barrio porteño de Recoleta recetaba un fármaco "de la competencia". LA NACION pudo conocer que lo tentaron con cursos en el exterior: la mayoría de los destinos eran ciudades puramente turísticas y su familia podía acompañarlo esos 15 días all inclusive.

Tal es la importancia de relevar la información de las farmacias que están surgiendo los agentes de propaganda farmacéutica o APF. Muchos son visitadores desempleados que se reciclan en esta nueva tarea. Esta práctica incluye distintas etapas y niveles de premios, de acuerdo con los dividendos que deje una buena "lapicera".



Una inversión en el largo plazo son los médicos residentes




Pero las estrategias se refinan. Son cada vez más sutiles, encriptadas. Un laboratorio, por ejemplo, alienta la prescripción de uno de sus productos inyectables para tratar el cáncer de próstata con un código numérico por cada unidad recetada. Eso equivale a un puntaje. A mayor cantidad, más lejos es el viaje en juego (con 100 puntos, el destino es Cancún). Cada unidad de ese remedio cuesta 5100 pesos y, vaya paradoja, esa empresa posee un código de ética que expresamente define esa promoción como "práctica ilícita". Hasta 2011, el laboratorio ofrecía electrodomésticos, pero su casa matriz en Europa decidió "cambiar un estilo de promoción tan grosero", según consta en una denuncia de un empleado.





Una inversión en el largo plazo son los médicos residentes. Como cazadores de talentos deportivos, las "valijas" recorren los hospitales para captarlos. Los tientan con muestras y acceso a bibliografía a cambio de recetas. Si un laboratorio despierta el interés de una de estas "lapiceras" en potencia, probablemente logre su lealtad. "Cuando a los médicos los ayudan de jóvenes, son fieles a quienes les dan una mano", confió una fuente de la industria que pidió reserva de su nombre, como la mayoría de los consultados.

A los más jóvenes les siguen en importancia los médicos con por lo menos diez años de antigüedad. La oferta incluye viajes al exterior y vouchers de compras. Computadoras, televisores y equipos de audio están entre los objetos más demandados.

Pero existe otro blanco de seducción: las secretarias. No sólo manejan la agenda de los médicos, sino que muchas están autorizadas por los profesionales para hacer y firmar recetas. Los APM les regalan muestras a cambio de información sobre la cantidad de prescripciones, los horarios y el tiempo libre de sus jefes para personalizar las invitaciones.

En un ranking elaborado de acuerdo con fuentes de los laboratorios, las especialidades más vulnerables son la dermatología, la traumatología, la reumatología, la oncología y la urología. El intercambio de "servicios" puede incluir dinero que se deposita en una cuenta personal o se entrega con un cheque. En 2012, un laboratorio de primera línea destinó mensualmente 20.000 pesos a un médico de una institución privada bonaerense, según confió a LA NACION el visitador, ya retirado, que participó de la operación.
Médicos que recibieron estos ofrecimientos detallaron, a cambio de no ser identificados, que ese portafolios de compensaciones también incluye fiestas privadas en yates, despedidas de año (con o sin servicio de acompañantes), el armado de una fundación para disimular la transferencia de cuantiosos fondos o el ofrecimiento de convertirse en "investigador" de un ensayo clínico con sólo reclutar pacientes para ese estudio.

Frente a este escenario, el Código de Ética para el Equipo de Salud de la Asociación Médica Argentina (AMA) y la Sociedad de Ética en Medicina establece que "los miembros del equipo de salud deberán abstenerse (...) de recibir privilegios o dádivas por el asesoramiento en la compra de material de uso médico o por recetar determinados productos médicos". Antes, aclara que es "una falta grave a la conducta ética la inducción, por parte de empresas y/o laboratorios, al uso de ciertos medicamentos o equipos biotecnológicos médicos con la promesa de dádivas o recompensas". LA NACION intentó hasta ayer sin suerte comunicarse con las autoridades de la AMA.

Las tres cámaras que agrupan a los laboratorios que operan en el país se limitaron a responder que los incentivos médicos son prácticas contrarias a la ética. Cilfa, que reúne a 45 laboratorios nacionales, envió su Código de Ética Empresarial. Destacó que "la promoción y la comercialización de productos debe ajustarse a las normas legales vigentes y a las buenas prácticas del sector", y remitió a una resolución de 2007 del Ministerio de Salud sobre la promoción de medicamentos de venta bajo receta. Allí se les prohíbe a los laboratorios "otorgar, ofrecer, prometer" a los médicos y su entorno algún beneficio, pero se les permite conceder becas de perfeccionamiento profesional. "Se prohíbe expresamente el condicionamiento a prescribir determinado producto", se aclara.

La cámara que representa a los laboratorios extranjeros respondió: "Las empresas que forman parte de Caeme cumplen con un estricto código de buenas prácticas que prohíbe expresamente los incentivos y que establece, entre otros aspectos, normas de transparencia en el relacionamiento con los profesionales de la salud. Cada una de las empresas en Caeme tienen sus propias y exigentes normas en la materia". En tanto, Cooperala, cuyas empresas representan el 20% del mercado de fármacos, aseguró: "No se pueden ofrecer incentivos porque hay una cuestión ética de por medio. Nunca la cámara recibió una denuncia".

Entonces, ¿los laboratorios no incentivan a los médicos? José Charreau, secretario de Acción Social de la AAPM, no dudó: "La respuesta es sí, los incentivan". Y agregó: "La industria manifiesta que se autocontrola con códigos de ética propios que incumple sistemáticamente. En realidad, es un argumento político para evitar leyes que regulen el mercado y la promoción de fármacos. Los visitadores médicos rechazamos estas prácticas corruptas. En todas las provincias se elaboraron leyes de profesionalidad, en las que la AAPM estuvo desde su génesis, y establecen que la promoción de los medicamentos debe regirse por pautas éticas y científicas, sin inducciones económicas, viajes, prebendas o regalías. En general, quienes realizan estas acciones no son APM".

La Comisión de Salud de la Cámara de Diputados está analizando un código de ética en el que participó la AAPM. Es el mismo texto que, aprobado por unanimidad en la Cámara baja, perdió estado parlamentario en un cajón del Senado. La misma resistencia encontró un proyecto de ley de la legisladora porteña Graciela Ocaña (Confianza Pública) para hacer públicos los incentivos que reciban los profesionales de la salud.


En Estados Unidos, la reforma del sistema de salud incluye por ley una iniciativa similar llamada Programa de Pagos Abiertos, que rige desde este año. Eso permitió conocer que la industria farmacéutica destinó el año pasado 3500 millones de dólares para 546.000 médicos y 1360 hospitales escuela. "El dinero o incentivo que reciben los profesionales en Estados Unidos es enorme e involucra todo tipo de intereses y formas. La Argentina no es ajena a eso", sostuvo Ocaña.

Para intentar resolver estos crecientes conflictos de intereses, promovió primero en Diputados y, ahora, en la Legislatura porteña, un proyecto para que estos incentivos sean públicos. "El proyecto encontró resistencia en los bloques, que se negaron sistemáticamente a darle tratamiento", dijo.

Para Constantino Touloupas, consultor independiente en políticas de medicamentos, hay que reconfigurar un sistema de prácticas tan naturalizadas que ya resultan atractivas hasta para los estudiantes de medicina. "Si la pregunta es si hay incentivos para que los médicos prescriban, la respuesta es sí. Y hay muchos que están convencidos de que eso no está mal, lo que es aún más grave", dijo Touloupas, que también es docente de farmacología y terapéutica de la UBA y la UNLP.

"Con un Estado en mal estado, sin funcionarios relevantes que puedan difundir normas éticas que debieran respetar los APM, los médicos y las empresas, y la industria que declara en el exterior que no va a sobornar más médicos, acá parece ser que no hay sobornos -señaló-. ¿Hay médicos que trabajan honestamente? Sí. ¿Hay médicos que quieren y tienen otra ética? Sí. El problema es que ya son minoría."

Ocaña consideró "imprescindible" transparentar los incentivos para proteger un bien aún mayor: la relación médico-paciente. "Es un vínculo muy especial, que si bien debe resguardarse, debe presentarse de la manera más transparente posible -indicó-. Los dineros que se pierden o se malgastan, ya sea por falta de políticas o por hechos de corrupción, afectan las prestaciones que reciben los pacientes. Las empresas y los laboratorios incentivan a los médicos a utilizar sus productos, aun cuando los sistemas de cobertura contemplan la provisión de insumos de iguales características que cumplen con todos los protocolos clínicos."

¿Bastaría con modificar la ley de prescripción por nombre genérico como se debate en el Congreso? Aparentemente, no. "Estamos basando toda una política en la hipotética exigencia de no sugerir una marca, lo que es una ficción -sostuvo Touloupas-. Un país que permite vales comerciales con un sticker o donde el recetario solidario sólo incluye la marca que tiene la promoción del laboratorio que ofrece esa receta está violentando la ley de prescripción por genérico. Acá se necesita la regulación del sistema. Si la industria puede tomar la información de mi receta en la farmacia e ir a visitar médicos para fortalecer la prescripción a cambio de dinero, el sistema está contribuyendo con el productor, no con el paciente. Y esa lógica colocó a la industria en la fabricación, la distribución, la gestión de convenios y la fijación de normas de reconocimiento de tratamientos de alto costo. ¿Y estamos esperando que se modifique una ley?"

Tres fuentes, una de ellas de alto rango en un ministerio, coincidieron en que la industria también es un fuerte promotor para ocupar cargos científicos, académicos y políticos en niveles de regulación y gerenciamiento.

"Todo esto lo saben las autoridades -aseguró Touloupas-. Quienes formamos médicos y farmacéuticos estamos muy preocupados porque hay que hacerlo en este sistema, que naturaliza esta práctica del incentivo o soborno. Y eso ya es de tal magnitud que parece que la noticia es que está mal. En realidad, el problema es que ocurre.


nota original en
http://bit.ly/1xukJzA

martes, 28 de mayo de 2013

EE.UU.: Big Pharma paga $ 1.000 millones para influenciar a los médicos


 Pharmatimes, 28 de mayo de 2013

El gasto de la IF en médicos de Estados Unidos alcanzó los US $ 1000 millones año pasado, como anticipo de la industria ante la llegada de la Ley de Transparencia.

 Esto es de acuerdo a cifras recopiladas por la firma PharmaShine en una consultoría realizada para el Financial Times (FT), que dice que el total de US $ 1000l millones (662.000 €) para el año 2012 es mucho mayor que en años anteriores, pero esto puede deberse a que una serie de empresas farmacéuticas por primera vez están revelando sus pagos.

De hecho, el FT dijo que analizados empresa por empresa, los pagos fueron menores ya que la mayoría de las empresas farmacéuticas

Todo esto sobreviene debido a que la industria en los Estados Unidos esta accediendo a la llamada Ley de Transparencia, que entrará en vigor en los próximos meses, que obliga a las farmacéuticas a dar a conocer la totalidad de sus pagos a los médicos.
El Financial Times del Reino Unido dice que estas nuevas cifras ponen de manifiesto el volumen de gasto de los fabricantes de medicamentos, que está dirigido a más de medio millón de médicos.

El informe encontró que Merck encabeza la lista con el pago de 226 millones de dólares de 2012, seguido de cerca por Lilly con US $ 219 millones y Pfizer con 162 millones dólares - los cuales tienen su sede en los EE.UU..

Gran parte del aumento en el gasto total revelado de 2012, proviene de Merck y Novartis, ya que estas dos empresas proporcionaron datos más completos por primera vez en el año. AbbVie, Forestal y UCB informaron sus datos por primera vez.

Dado que la legislación Sunshine aún no ha entrado en vigencia, Sanofi, Roche, Bayer y Amgen han decidido no divulgar sus pagos para el año 2012. Pero es de esperar que la cifra de $ mil millones para 2012 aumentará considerablemente el próximo año ya que todas las empresas tendrán que mostrar sus datos.

El dinero está siendo utilizado en varias áreas, incluyendo entretenimiento, pero también para consultorías, educación e investigación, a través de las cuales, los críticos argumentan que existe un riesgo de distorsionar la prescripción de medicamentos, de acuerdo con el FT.
Daniel Carlat, director del proyecto de receta en el Pew Charitable Trusts, expresó su preocupación por las sumas involucradas. "Hay muchos datos que muestran que ese gasto pueden influir indebidamente en los médicos, por lo que los pacientes pueden estar recibiendo los medicamentos erroneos y los más caros", dijo.

Nota original
Pharma pays $1bn for US doctor influence. May 28, 2013
http://bit.ly/10xvSxq

martes, 5 de junio de 2012

Informes de los pagos de laboratorios a médicos, poca utilidad, en el Annals

¿Sirven las leyes de acceso a datos sobre pagos de laboratorios a médicos?
Andrew M. Seaman,   publico es., 5 de juno 2012



 Un estudio realizado en Estados Unidos sugiere que aprobar una ley que le exige a la industria farmacéutica informar cuánto le pagan a los médicos no modificaría la forma en que los doctores recetan medicamentos.
En dos estados que aprobaron las denominadas "leyes de registros abiertos", las decisiones de los médicos de qué fármacos recetar no variaron con respecto de las de sus pares de estados sin esas normas.


Eso se debería a que la industria está obligada a informar a las agencias oficiales y no a la población.
"Fue una manera de hacer un análisis rápido para determinar si existía un efecto que pudiéramos medir", dijo Kavita Nair, autora principal del estudio y profesora asociada de la Facultad de Farmacia de la University of Colorado, en Aurora.


La ley que en el 2010 modificó el sistema de salud de Estados Unidos incluye un artículo que obliga a la industria farmacéutica a informar sobre ciertos pagos a los médicos, como aranceles por servicios de consultoría, presentaciones orales o viajes.
En una carta en Archives of Internal Medicine, el equipo de Nair explica que analizó las experiencias de Maine y West Virginia, dos estados con leyes de registros abiertos desde el 2004.
Con información sobre las prestaciones brindadas entre julio del 2003 y marzo del 2009, los autores determinaron la cantidad de recetas elaboradas en cada estado de estatinas y antidepresivos inhibidores selectivos de la recaptación de la serotonina (ISRS) de marca.
Los resultados los compararon con los de otros estados sin esas leyes: New Hampshire y Rhode Island versus Maine y Kentucky y Delaware versus West Virginia.


El equipo explica que los pacientes pueden acceder a versiones genéricas más económicas de las estatinas y los ISRS, mientras que la industria apuesta al marketing para aumentar la cantidad de recetas de las versiones de marca.
Los autores observaron que "hubo un efecto reducido de las leyes de acceso a la información en Maine y West Virginia, tanto para las estatinas como para los ISRS".
Cuando aparecieron en el mercado los genéricos, por ejemplo, la cantidad de recetas de las estatinas de marca disminuyó un 45,3 por ciento en Rhode Island, que no posee una ley de registros abiertos, comparado con el 50,6 por ciento en Maine.
Aunque algunas diferencias son estadísticamente significativas, Nair dijo que no son tan grandes, lo que sugiere que las leyes no modificaron la conducta de los médicos.
Algunas limitaciones del estudio son que otros factores pudieron haber sesgado los resultados, que los estados utilizados para la comparación tendrían otras diferencias y que tener en cuenta las recetas por nombre de marca no permitiría detectar los efectos de las leyes.
"Esto ni siquiera nos da un panorama general", opinó, por su parte, Charles Ornstein, que analizó los pagos a los médicos en ProPublica, un medio de investigación sin fines de lucro de Nueva York.


FUENTE: Archives of Internal Medicine, online 28 de mayo del 2012
Nota Original
http://bit.ly/LAaoG0



Articulo de referencia
Pham-Kanter G, Alexander GC, Nair K.Effect of physician payment disclosure laws on prescribing. 2012 May 28;172(10):819-21.

disponible en http://bit.ly/LbOAze

ver  notas previas

Octubre 2010: Empresas farmacéuticas pagan a 17.000 médicos de EEUU
Enero    2012: La industria farmacéutica deberá informar de los pagos a médicos en EE.UU





martes, 17 de enero de 2012

La industria farmacéutica deberá informar de los pagos a médicos en EE.UU


1.100 compañías publicarán los pagos a médicos en EEUU

  • Las multas por omitir información serán hasta de un millón de dólares
  • Toda la información estará disponible en una base de datos pública
ELMUNDO.es 17/01/2012

La nueva legislación sanitaria impulsada por la administración Obama obligará a las compañías que tengan al menos un producto financiado por el sistema sanitario público a difundir todos sus pagos a médicos.

Según la estimación oficial, más de 1.100 empresas de medicamentos y tecnología médica tendrán que aportar información completa sobre cualquier pago a especialistas (incluidas las invitaciones de mínimo coste, como llevar comida a una reunión de trabajo).
Según publica 'The New York Times', el Gobierno llevará a cabo inspecciones para revisar los registros de las compañías y asegurarse de que cumplen con la ley y no omiten pagos.

Toda la información estará disponible en una base de datos pública.
Las multas por incumplir la norma de transparencia serán de 10.000 dólares por cada pago que se omita. Las compañías que oculten información de forma deliberada se enfrentarán a multas hasta de un millón de dólares.

Hasta ahora, la publicación de este tipo de información era voluntaria y sólo 12 compañías habían hecho públicos sus pagos a médicos. El sitio web ProPublica ha desarrollado un proyecto a partir de esta información, llamado "Dollar for Docs", que incluye una base de datos abierta a los lectores.
Las ventas de medicamentos de las 12 compañías incluidas en el trabajo representaron en 2010 alrededor del 40% del mercado farmacéutico en Estados Unidos.

Los pagos a médicos son legales, pero existe un debate sobre la influencia que pueden ejercer en algunos casos sobre la elección de tratamientos y la prescripción de fármacos. Diversos estudios han mostrado que pueden condicionar la decisión del médico.

El sistema público sanitario de EEUU (Medicare, para los jubilados, y Medicaid, para las personas con ingresos mínimos o pocos recursos) tienen un presupuesto anual para fármacos y tecnología médica superior a los 100.000 millones de dólares.
La patronal de la industria farmacéutica en EEUU ha apoyado estas "medidas de transparencia" pero ha pedido que la información de los pagos a médicos se difunda en el contexto apropiado para que se pueda entender la colaboración entre industria y especialistas en campos como la educación médica o el desarrollo de medicamentos.